Diversos autores han identificado en este proceso:
1. La conciencia fonológica que permite la comprensión de que las palabras están compuestas por una serie de sonidos que se llaman fonemas, que los fonemas se representan con letras, que las letras forman sílabas cuando se juntan y que las sílabas forman palabras, distinguiendo entre:
La conciencia silábica (que permite identificar o manipular de forma consciente las sílabas que componen una palabra), la Conciencia intrasilábica (como la habilidad para segmentar las sílabas en sus componentes intrasilábicos y rima) y la Conciencia fonémica (que permite a los niños y niñas comprender que las palabras habladas están constituidas por unidades sonoras discretas o unidades mínimas no significativas: los fonemas). Treiman (1991).
2. El principio alfabético, que permite la comprensión de que los sonidos son representados por letras. Este es uno de los conceptos base para la decodificación de la lectura. (Graves, Juel y Graves, 2007). El principio alfabético “implica identificar las unidades fonológicas del lenguaje y comprender el lenguaje como una serie de combinaciones de estas unidades” (Villalón y otros, 2007). Esta comprensión de que existe una correspondencia sistemática entre letras y sonidos es una competencia clave para que un niño/a pueda comenzar a leer y escribir.
3. El concepto de letra, que permite comprender cómo funcionan las letras y cómo se usan los libros. Para los niños y niñas de nivel transición, los conceptos apropiados incluyen cosas tales como distinguir entre fotos y letras y saber que el español se lee de izquierda a derecha y desde arriba hacia abajo (Dickinson, 2012).