Estrategia de Escritura Emergente

Para comenzar este curso y recibir tu certificado por favor inicia Sesión o regístrate

Los pasos de la estrategia

¿Cómo lo hacemos?

La estrategia de Escritura Emergente nos permite integrar escritura y lectura, como una primera aproximación al desarrollo de estas habilidades en los niños y niñas. En este proceso es fundamental contar con unidades coherentes de trabajo que incluyen diferentes actividades y niveles de apoyo, según las necesidades y avances de cada niño/a.

La realización de esta estrategia comienza con los siguientes pasos:

fundacion-oportunidad-1

Realice la lectura activa del cuento. Es importante mostrar las ilustraciones del texto, usar una entonación atractiva para así facilitar la comprensión y mantener el interés de los niños y niñas.

fundacion-oportunidadLuego de leído el cuento y en conjunto con el grupo, invítelos/as a extraer una idea del texto para escribir (propósito) y definir a quién irá dirigido (audiencia).

Según las habilidades en escritura que poseen los niños/as, realice un ejemplo de escritura emergente, utilizando alguno de los 4 niveles de apoyo (modelada, compartida, interactiva, independiente).

Invite al grupo a sentarse y a escribir de forma independiente, apoyados de su abecedario individual, muro de palabras (abecedario de pared) o alargando sonidos de las palabras que deseen escribir.

 

Al aplicar la estrategia de escritura emergente, es necesario:

Motivar a los niños y niñas al momento de leer el texto, ya que así tendrán interés por escribir y a su vez ayudará a reforzar el concepto de propósito en la escritura.

Promover y celebrar lo que cada niño/a escriba y lea, valorando la capacidad de escritura de todos y todas.

Planificar distintas experiencias de escritura todos los días de la semana. Recuerde que el niño/a puede ir escribiendo de acuerdo con su tiempo y a la etapa en que se encuentre.

Dar variadas oportunidades para escribir y tener la posibilidad de ir consolidando la escritura de manera autónoma sin necesitar el apoyo del adulto. Lo importante frente a la escritura espontánea o mediada por el adulto, es que el niño/a debe tener siempre claro, para qué y para quién está escribiendo. Solo así, se sentirá motivado/a y con expectativas de lograr lo que se propone al momento de escribir, descubriendo la utilidad de la escritura, es decir, que se puede escribir lo que decimos y leer lo que escribimos.